Bitcoin: máximo histórico en pleno shutdown y todavía sin interés del retail.
- Archivo Cripto

- 6 oct
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BTC registró un nuevo máximo histórico hoy 6 de octubre sobre los $126,000 y opera cerca de ese nivel mientras el mercado digiere el shutdown en EE. UU.
El fin de semana dejó una foto potente: Bitcoin alcanzó un nuevo máximo histórico de $125,708 en Bitstamp, seguido de un retroceso veloz hacia $123,000–$124,000 antes de recuperar tracción para volver a marcar un ATH hoy lunes en $126.067.
La duda inmediata: ¿queda una última pierna alcista o empieza un tramo de consolidación.
Señales de ciclo.
Para los cofundadores de Glassnode, Jan Happel y Yan Allemann (“Negentropic”), el tope de ciclo de Bitcoin podría darse en 4–5 semanas, y el de altcoins en 6–8 semanas. Su lectura combina on-chain e historia de ciclos: aún no se observan extremos típicos de techos, lo que dejaría espacio para otro impulso, aunque con márgenes decrecientes. Aun así, el mercado vigila la zona $120k–$123k como soporte clave: perderla abriría correcciones más profundas; sostenerla preserva la opción de ruptura al alza.
Macro manda: shutdown, empleo y flujos.
En Estados Unidos, el shutdown gubernamental y datos débiles de empleo coincidieron con entradas récord de $5.95 mil millones a productos de inversión cripto, elevando los activos bajo gestión a $245 mil millones. Solo los ETFs de BTC en EE. UU. aportaron cerca de $3.2 mil millones, mientras que Bitcoin capturó $3.55 mil millones (su mejor semana). ETH revirtió salidas con $1.48 mil millones; fondos de Solana tocaron $706.5 millones y XRP sumó $219.4 millones.
La lectura de mercado: las asignaciones responden a señales macro —liquidez, tipos y estabilidad fiscal— más que a euforia minorista.
El dólar bajo la lupa:
Otra narrativa ganó tracción: la del “debasement trade”, que empareja Bitcoin y oro como coberturas ante la pérdida de poder adquisitivo de las divisas. JPMorgan actualizó su objetivo de BTC a $165,000 a fin de año y subrayó la comparación con el oro (por encima de $3,900), mientras gestores hablan de un cambio de régimen: más allá del “activo de riesgo”, BTC empieza a verse como pieza de protección de tesorerías e instituciones frente a déficits persistentes y recortes de tipos en un contexto de inflación “pegajosa”.
Más allá de BTC: acumulación en ETH. En la última semana, ballenas con 10,000–100,000 ETH compraron en conjunto cerca de 800,000 ETH, acompañando la ruptura de $4,500 y dejando un “piso” de demanda a vigilar. El mercado seguirá testando la resistencia de $4,600–$4,700; superarla habilitaría aspiraciones de $5,200 (dato provisto por el usuario).
Por qué importa. Con flujos institucionales en máximos, una macro frágil (shutdown, empleo flojo) y una narrativa de debasamiento en ascenso, Bitcoin se mueve en uno de los tramos más sensibles del ciclo. Si el soporte inmediato aguanta y el apetito institucional se sostiene, el “acto final” podría venir con volatilidad creciente y rotaciones hacia ETH y grandes altcoins. Si no, un enfriamiento ordenado buscará limpiar excesos de corto plazo antes de reanudar tendencia.
El tablero de las próximas semanas se jugará en tres frentes:
(1) niveles técnicos de BTC en torno a $120k–$123k,
(2) flujos hacia ETFs/ETPs y
(3) señales macro de EE. UU. Mientras tanto, el mercado ya trata a cripto menos como moda y más como termómetro de liquidez y cobertura frente a la erosión del dinero fiat.













